Mientras el peronismo se prepara para "hacer lío", LLA parafrasea a Alsogaray y solo piensa en "pasar el otoño"
Se inicia otra semana caliente, con debate final de ley "ómnibus" -que corre riesgo de transformarse en "remis" si se aceptan todos los reclamos de los "dialoguistas"- y paro general de las centrales sindicales, con apoyo de gobernadores, dirigentes sociales y jefes comunales de Unión por la Patria. Comienzan a llegar los primeros rebotes negativos de las medidas y se resiente la imagen presidencial. Ecos de Davos, en donde el mundo sí pudo verlo en vivo y en directo a Javier Milei, desempolvando un discurso extraído de sus manuales anarco-capitalistas.
Uno de los discursos más populares y recordados del Papa Francisco fue aquel mensaje pronunciado durante su encuentro con los jóvenes argentinos en la Catedral de San Sebastián, durante las jornadas juveniles mundiales de Río de Janeiro en julio de 2013. "Hagan lío, cuiden los extremos del pueblo, que son los ancianos y los jóvenes; no se dejen excluir, y que no excluyan a los ancianos", les dijo a los miles de pibes y pibas que lo escuchaban con mucha atención en aquel escenario carioca.
Por entonces apenas habían transcurrido cuatro meses desde su asunción como máximo jefe del catolicismo, tras la renuncia de su antecesor Benedicto XIV y ya el ex arzobispo de Buenos Aires instaba a los sectores juveniles para que ganaran la calle y no se durmieran ante un sistema que amenazaba con poner en jaque los postulados de la doctrina social de la Iglesia, “siempre con la mirada puesta en el pueblo que sufre”.
El lunes pasado el Sumo Pontífice recibió en una audiencia privada en la Biblioteca del segundo piso del Palacio Apostólico, a Alberto Fernández, quien llegó al Vaticano en taxi, acompañado de su pequeño hijo Francisco. El encuentro -que fue difundido por la Santa Sede- no tuvo demasiada trascendencia periodística en la Argentina, pero representó un gesto político significativo, pocas horas después de que el actual mandatario argentino Javier Milei comunicara su viaje a Roma para reunirse con el jefe máximo de la cristiandad y se conociera la intención del Papa de visitar el país “durante la segunda mitad de 2024”.
“Francisco no da puntada sin hilo, haberlo recibido a Alberto con el protocolo de un presidente, es un hecho que debe ser leído en clave política, mucho más en el contexto en el que se dio esta audiencia”, le dijo a Data Clave un exembajador que supo ocupar la residencia romana de Via Della Conciliazione. Según pudo confirmar Data Clave, lo de su presencia en Argentina se definirá “luego de su viaje por la Polinesia” y dependerá “de la salud del Pontífice” y de “las condiciones sociales en las que se encuentre el país”.
De acuerdo a una fuente con acceso directo a los principales salones de la residencia apostólica, antes de despedirse de Fernández, el heredero de San Pedro lo saludó efusivamente y le transmitió un mensaje dirigido al pueblo argentino: “Hagan lío”, le dijo.
Sindicatos y peronismo se preparan para el lío
El arco opositor nucleado en las tres centrales sindicales y los partidos que integran Unión por la Patria intentarán recuperar iniciativa política con el paro general del miércoles 24 de enero en la disputa que viene manteniendo con el gobierno libertario por la aprobación de la Ley Ómnibus que “avasalla derechos de los trabajadores y pone en riesgo a la democracia”.
Previendo un triunfo parlamentario del oficialismo, que logró acercar posiciones con los sectores “dialoguistas” y sumar votos a la iniciativa -que esta semana deberá definir su media sanción en Diputados- los principales referentes del espacio peronista procurarán demostrar su poder de movilización para resistir “el embate de este paquete de medidas que amenazan con llevarse puesto un conjunto de conquistas esenciales del campo popular”, le dijo a este portal un referente bonaerense de UxP.
Si bien la convocatoria inicial provino de las tres centrales sindicales, luego se sumaron movimientos sociales, intendentes de la provincia de Buenos Aires y La Cámpora, a pesar de no haber participado el jueves en la casa de la provincia de Buenos Aires, de la convocatoria realizada por el gobernador Axel Kicillof. Allí, se coordinaron aspectos logísticos de la participación peronista en la movilización del próximo miércoles y se definieron acciones parlamentarias frente al debate que se retomará el martes en el plenario de comisiones de diputados.
Por su parte, el oficialismo debió admitir que para lograr la aprobación de su propuesta, era imprescindible negociar con los sectores afectados por las medidas y con los bloques opositores. Tras varios idas y vueltas de borradores, finalmente el gobierno -a través de sus interlocutores Santiago Caputo y Guillermo Francos- se comprometió a no tocar la fórmula de actualización jubilatoria, no echar mano al recurso de las retenciones a las economías regionales y no privatizar YPF, entre otras “concesiones”. Si bien esto no garantiza el triunfo de la propuesta, le otorga a los diputados de LLA una chance palpable de obtener la tan ansiada media sanción antes del próximo fin de semana.
Desde el bloque de UP garantizan la unidad de los legisladores y afirman que “los 102 votos en contra nuestros están garantizados”, a pesar de lo cual persisten dudas respecto a la actitud de algunos gobernadores como Osvaldo Jaldo y Raúl Jalil que adoptaron una actitud más dialoguista, tal vez en busca de acercamientos convenientes para sus intereses regionales. “Al dúo JJ no le fue tan mal, al tucumano le aceptaron no incluir la modificación a la ley del azúcar, que le generaba flor de quilombo interno con los productores; y el catamarqueño seguro que arregló algo respecto al tema del litio”, comentó un diputado de UxP.
Imagen en caída libre
Mientras se debate en el Congreso y se rosquea en las confiterías aledañas, el clima social se enrarece de la mano del sostenido crecimiento del costo de vida y la potencia que Milei mostró en el balotaje, comienza a desinflarse. A solo un mes de haber asumido, la imagen positiva del Presidente cayó 5 puntos respecto de la que tenía en noviembre último.
Ese no fue el único frente en el que sufrió un revés: el 47 por ciento de la población opina que el jefe de Estado tiene actitudes autoritarias, el 56 por ciento está en contra de los cambios en la legislación laboral y el 48,4 rechazó la privatización de las empresas estatales. Por si fuera poco, el 53,3 sentenció que no hay que dolarizar la economía, la principal propuesta de campaña.
Solo un tercio de la población cree que el Gobierno está ajustando especialmente a la "casta política" contra el 52,1% que opina que a los trabajadores y jubilados. Apenas un cuarto de los argentinos piensa que hay que recortar los derechos laborales y solo el 23,6% apoya la idea de que "debemos pagar los alimentos y la energía a precios internacionales", como impulsa el Presidente.
La evaluación del gobierno nacional sobre la base de las primeras medidas de gobierno la hizo la consultora Analogías en la primera quincena de este mes, período durante el cual se dispararon los precios y la inflación producto de la devaluación, y se deterioraron los ingresos de todos los sectores, particularmente de los más postergados.
"Los datos están muy concatenados y hay una pregunta que nosotros hacemos acerca de sobre qué sectores recae el ajuste y el 52 por ciento de la muestra dice que los trabajadores y los jubilados son los que efectivamente se ven ajustados", señaló Marina Acosta, Directora de Comunicación de la consultora.
En consonancia, culminó con otro dato surgido de la encuesta: "Preguntamos quiénes son los principales beneficiarios de esta política económica de Milei y el 43 por ciento coincide en que son los grandes empresarios. Ante esto hay un 62 por ciento que opina que habrá mucha resistencia social y sindical al ajuste".
Pasar el otoño
En 1958 Arturo Frondizi asumió la presidencia gracias al triunfo de la UCRI, construido en base a un pacto secreto con Juan Domingo Perón quien, desde el exilio, le garantizó el apoyo y los votos del peronismo. Pero además de un acuerdo, había un plan para reconstituir la matriz industrial en la Argentina y pasar de la sustitución de importaciones a la industria pesada.
Sin embargo, la brutal devaluación provocó que la inflación superara el 130% y que la economía se frenara, producto de lo cual Frondizi intenta una salida por derecha y convoca como ministro de Economía al capitán ingeniero Alvaro Alsogaray. Al momento de asumir, en junio de 1959, dio un discurso que será repetido como un mantra por muchos que lo sucedieron.
"Muchos años de desatino y errores nos han conducido a una situación muy crítica. Es muy difícil que este mes puedan pagarse a tiempo los sueldos de la administración pública. Todavía seguiremos por algún tiempo la pendiente descendiente que recorremos desde hace ya más de diez años. Las medidas en curso permiten que podamos hoy lanzar una nueva fórmula: Hay que pasar el invierno".
Algo muy similar es lo que se murmura en los pasillos de la Casa Rosada por estas horas. “Lo peor está por venir aún”, le dijo a Data Clave un funcionario que se reúne a diario con el presidente. “El ajuste de verdad se va a sentir entre marzo y abril, cuando vengan las cuotas de los colegios, terminen de subir las tarifas”, explicó el funcionario. Y agregó: “la pérdida salarial puede llegar hasta el cuarenta por ciento, por eso decimos que si pasamos el otoño, recién en mayo-junio podremos evaluar los primeros resultados”.
Claro, todo esto teniendo en cuenta que el plan oficial de lograr la aprobación de sus propuestas, pasen el filtro parlamentario sin alterar el sentido fundamental de su orientación: mostrar que el ajuste declamado, no es solo de pico, sino que se sostiene con medidas reales. “No le pedimos tanto, pero en el enunciado, las medidas van en el sentido que nosotros proponemos, eso sí, vamos a esperar y ver”, le dijo a un colega que cubría el Foro Económico Mundial una importante funcionaria del Fondo Monetario.
El fantasma que recorre el mundo es socialista
Ante un auditorio que lo escuchaba con atención y perplejidad, durante su discurso en el Foro de Davos, Milei sostuvo que “occidente está en peligro” porque allí prima “una visión del mundo que conduce al socialismo”.
Durante alrededor de 20 minutos en los que reiteró conceptos y definiciones utilizadas durante sus antiguas participaciones en programas de TV y la campaña que lo llevó al poder, el presidente insistió con su relato neoliberal, redefinido como libertario y se valió de comparaciones históricas de imposible constatación. Y volvió a plantear la antinomia que, para Milei, sigue vigente: el capitalismo de libre mercado y el socialismo, que él llama colectivismo.
Ya de regreso, Milei enfrenta una semana compleja ante el paro de la CGT, la inestabilidad de los mercados y la discusión por la Ley ómnibus. Pero el presidente elige polarizar con la cúpula del movimiento sindical y apunta a los dirigentes de Unión por la Patria que buscan en la medida de fuerza convocada para el miércoles un leitmotiv que les permita recuperar la iniciativa política.
Se trata de una confrontación que aún no tiene un final escrito, ya que depende de factores que no dirimen de manera directa los contendientes. “Si logramos contener al dólar blue, el Congreso aprueba el paquete sin alterar el espíritu que nosotros buscamos y la Corte no estorba, que hagan lo que quieran, nosotros no nos vamos a detener”, le confió a este portal un funcionario muy importante de la administración nacional.
El problema para el gobierno se suscitará si esto no ocurre y sus tres variables se ven alteradas por la realidad. Ahí cobrará vital importancia la movilización popular, a la que siempre es más afecto el peronismo y los gremios, que el universo libertario sostén de una gestión desgastada en tiempo récord.